Introducción

A pesar del creciente interés por la crianza de camélidos sudamericanos en países andinos y aún en Estados Unidos y algunos países europeos, la información nutricional disponible en estas especies es aún escasa (López y Raggi, 1992), lo que contrasta con la gran cantidad de información nutricional que existe en los demás herbívoros domésticos. La información disponible indicaría que parte de la rusticidad de estos animales derivaría del hecho que ellos son más eficientes que los rumiantes comunes en la utilización de energía y proteína de forrajes toscos (Clemens y Stevens, 1980; San Martín y Bryan, 1989; Fowler, 1989) por lo que parece muy atractivo realizar trabajos experimentales relacionados con la evaluación nutricional en estas especies.

Muchos de los trabajos nutricionales en herbívoros, especialmente aquellos que relacionan la utilización de determinados nutrientes con las características de su sistema digestivo, requieren de un acceso fácil y permanente a ciertos compartimentos donde ocurren actividades específicas relacionadas con la utilización de ellos con el objeto de colocar o extraer muestras, y/o realizar diferentes tipos de mediciones (Jarret, 1948; Hecker, 1974). Esto necesariamente requiere de intervenciones quirúrgicas (fistulaciones) y de dispositivos especiales (cánulas). Pero son muy escasas las descripciones de estos procedimientos que se pueden encontrar en la literatura en estos animales (Vallenas, A.P., 1956; Galotta y col., 1990), algunos son de mucha complejidad, los animales demoran mucho tiempo en recuperarse y no siempre son aplicables a las condiciones locales. Para llevar a cabo trabajos experimentales de evaluación nutricional de recursos, alimentarios potencialmente utilizables por la Alpaca (Lama pacos) y relacionarlos con características ruminales, hemos practicado fistulaciones del compartimento 1 (rumen) y desarrollado las cánulas adecuadas a dicho propósito.

 

 1 Financiado por Proyecto FONDECYT N° 1940253.

Materiales y procedimientos quirúrgicos

Animales

Se emplearon cinco alpacas adultas, machos, con un peso promedio de 65 kg. Un primer animal de desecho se utilizó para estudiar su manejo durante el acto quirúrgico, técnicas de anestesia, abordaje y relaciones anatómicas del lugar seleccionado, así como efectuar mediciones de espesor y conformación de la pared ruminal. De acuerdo a esta experiencia se procedió al diseño y confección de las cánulas y a la cirugía del resto de los animales.

Procedimiento quirúrgico

Los animales fueron fistulados empleando básicamente la técnica descrita por Cabrera y col. (1980) para caprinos. Fueron mantenidos en ayunas por 48 hr. El protocolo anestésico consistió en atropinización 0,03, como y premedicación y anestesia con Ketamina (Ketostop ® - Invetec) i.m. en dosis de 10 mg por kilo de peso. La zona de abordaje (punto central de un triángulo del flanco izquierdo, formado por el último arco costal, el extremo de las apófisis transversas de la parte lumbar de la columna y la parte anterior de la pelvis) se depiló y desinfectó (Povidoná Yodada) y se procedió a infiltrar localmente con Li docaína (2%) en forma de anillo, los plagios cutáneos, musculares y peritoneal. Los animales fueron operados en la posición de decúbito lateral derecho sobre una mesa. Una vez logrado el nivel de inconsciencia y analgesia local deseada, se procedió a incindir la piel con bisturí en forma de círculo de 6 cm de diámetro aproximadamente (Figura 1), removiendo el trozo de piel (Figura 2), para luego abrir los planos musculares abdominales correspondientes (oblicuo abdominal externo, oblicuo abdominal interno, transverso del abdomen) y la fascia transversa empleando disección roma con tijeras (Figura 3). Exponiendo el peritoneo, se procedió a su abertura, pinzando los extremos de él para facilitar su sutura durante la fase de síntesis de la pared abdominal. Para fijar el compartimento 1 (rumen) a la piel en su posición definitiva, se realizó una sutura no perforante empleando hilo de lino con puntos en 'U' que traspasaban piel, peritoneo y pared del compartimento 1 (comprometiendo peritoneo visceral y musculatura, sin entrar a la mucosa), para luego salir atravesando peritoneo y piel nuevamente. Antes de anudar el punto se colocó un capitón de gasa para aumentar la superficie de contacto del punto con los tejidos y disminuir las posibilidades de desgarro. Estas suturas se repitieron en los cuatro puntos cardinales de la incisión cuidando de mantener la posición normal de C 1 en relación con la abertura en la pared abdominal (Figura 4). Se completó la sutura de la zona colocando puntos intermedios en los espacios entre los primeros cuatro puntos hasta asegurar un cierre hermético de la pared abdominal (Figura 5) siempre empleando la técnica aséptica o no perforante.

Completada esta etapa, se procedió a seccionar y remover el trozo circular de pared ruminal que estaba delimitado por las suturas (Figura 5). En caso que algunas de las arterias o venas seccionadas sangrara profusamente, se procedió a su sutura empleando catgut.

Después del aseo y desinfección con Quemisprey de la zona intervenida, se procedió a la instalación de la cánula (Figura 6) según se describe a continuación. El animal fue tratado con antibióticos (i.m.) durante 5 días y al séptimo día se procedió a remover los puntos.

Figura 1. Incisión de la piel en forma de círculo.

Figura 2. Remoción del trozo de piel.

Figura 3. Separación de los planos musculares abdominales empleando disección roma. 

Figura 4. Fijación del rumen (Cl) a la piel empleando puntos en 'U' en los cuatro puntos cardinales.

Figura 5. Sutura de la piel - rumen completada y apertura de la pared ruminal.

Figura 6. Cánula instalada en su lugar.

Cánulas

Las cánulas fueron confeccionadas en goma y PVC, según la técnica de Cabrera y col. (trabajos en preparación). Para dicho efecto se empleó una goma prevulcanizada, de tipo neutro (Michelín, REPAL 0.5 - B, 585-225) de dos milímetros de espesor y del cual se cortaron los diferentes componentes de la cánula. Éstos fueron los siguientes: un disco interno de 8,5 cm de diámetro, uno externo de 12 cm de diámetro y un cuerpo en forma de tuvo de 5 cm de largo y 4,5 de diámetro.

Cada uno de los componentes de la cánula fueron construidos de tres capas del material para aumentar su espesor y sus características de elasticidad y resistencia.

La cánula fue colocada en el interior de un molde y vulcanizada en un autoclave (All American Electric Pressure Steam Sterilizer, modelo 25X) durante media hora a 120°C de temperatura y 150 libras de presión. La cánula se completó con una unión de PVC cilíndrica de 40 mm de diámetro interior, con hilo exterior en ambos extremos. Uno de los extremos con hilo se eliminó. Para este conjunto se adaptó una tapa del mismo material con hilo interior. Este aditamento de PVC se instalaba en la parte central de la cánula.

Discusión

Las alpacas respondieron en forma excelente a todo el procedimiento quirúrgico. Su nivel de sedación y anestesia fue logrado en un corto tiempo promedio y la profundidad fue adecuada. Llamó la atención lo delgado de la pared abdominal de esta especie, derivado principalmente del reducido espesor de los planos musculares. A pesar de ello en algunos animales se presentaron hemorragias de relativa importancia al abrirlos mediante incisión roma debido a la presencia del curso de los vasos. El peritoneo presentó cierta dificultad para su manipulación y sutura por su gran fragilidad. Las cánulas se adaptaron muy bien a sus respectivas fístulas, sin que se presentara fuga de contenido ruminal. Algunos animales presentaron procesos de necrosis de tejido en el borde de la fístula, que mejoraron en poco tiempo luego de la extracción de las suturas y los respectivos cuidados postoperatorios. Los animales no presentaron rechazo de las cánulas ni tampoco se observó conductas conducentes a su remoción. A los pocos minutos de operados, la mayor parte de los animales se pusieron espontáneamente de pie y consumieron alimento y agua en forma normal al día siguiente.

En el momento de escribir el presente trabajo, los animales habían completado 24 meses desde la cirugía, sin que ninguno presentara ninguna alteración derivada de ello. En algunos animales se presentó posteriormente una fuga pequeña de contenido ruminal en torno a la cánula, pero esto es frecuente en este tipo de intervenciones y no reviste peligro para el animal, ni alteración significativa de su proceso fermentativo ruminal.

Se puede concluir que técnicas quirúrgicas tradicionales empleadas en pequeños o grandes rumiantes son perfectamente aplicables a esta especie y que igualmente soportan muy bien tanto el tipo de cánulas como el material empleado, considerando eso sí las precauciones necesarias para tomar en cuenta el espesor de la pared abdominal para su confección.

Referencias

CABRERA, R., OPAZO, L. y GONZÁLEZ, E., 1980. Fistulación y canulación permanente del rumen del caprino. Arch. Med. Vet. 12: 249-251.

FOWLER, E.M., 1989. Medicine and surgery of south american camelidae. Chapter 2 'Feeding and Nutrition' Iowa State University Press, Ames Iowa, USA.

GALOTTA, J.M., TRIBULO, H., FRANK, E.N., BOLLATI, G.P. y BULASCHEVICH, M.C., 1990. Fístula del compartimento mayor del estómago en los camélidos sudamericanos domésticos. Anatomía topográfica, técnica quirúrgica y cuidados postoperatorios. Rev. Arg. Prod. Anim. 10(1): 81-89.

HECKER, J.F., 1974. Experimental surgery on small ruminants. Butterworths & Co. (Publishers) Limited.

JARRET, I.G., 1948. J. Council Sci. Ind. Res. 21, 311-315.

LÓPEZ, A. y RAGGI, L.A., 1992. Requerimientos nutritivos de camélidos sudamericanos: Llamas (Lama glama) y Alpacas (Lama pacos). Arch. Med. Vet. XXIV, N'2: 121-130.

SAN MARTÍN, F. y BRYANT, F.C., 1989. Nutrition of domesticated south american llamas and alpacas. Small Rum. Res. 2: 191216.

VALLENAS, A.P., 1956. Fístula cerrada en el rumen de alpacas. Rev. Fac. Med. Vet. Lima 7-11: 172-177.